Denominaciones:
Latín: Beta vulgaris var. altissima.
Castellano: Acelga.
Familia:
Quenopodiáceas.
Hábitat:
Originaria de Europa meridional, crece de forma espontánea en la región mediterránea. Se cultiva extensamente en todas las regiones templadas del planeta.
Parte utilizada:
Los peciolos y nervaduras medianas de las hojas.
Principios activos y componentes principales:
- Sacarosa (27%), además de coniferina, galactinol, vanillina y gran cantidad de ácidos orgánicos y azúcares.
- Betaína: derivado del ácido trimetilaminoacético.
- Aminoácidos: guanidina, isoleucina, glutamina y arginina.
- Saponinas, derivados de la xantina y la colina.
Efectos:
- Hepatoprotector
- Hipotriglicerimiante (betaína, que interviene en los procesos de metilación hepática, y transforma los triglicéridos en lipoproteínas, facilitando el metabolismo de las grasas)
- Antioxidante
Indicaciones:
Sistema, aparato u órgano | Patologías específicas |
Sistema cardiocirculatorio | Trastornos circulatorios, hipertrigliceridemia, arteriosclerosis |
Hígado y vesícula biliar | Esteatosis hepática |
Piel | Micosis interdigitales (jugo) |
Advertencias y precauciones:
No tiene ninguna toxicidad y, a pesar de su alto contenido en azúcares, es recomendable en las dietas de los diabéticos por la fibra que contiene y por ser fácilmente asimilable.